IBM y Red Hat, ha revelado que su personal no necesita volver a la oficina nunca más
Red Hat permite que el personal se mantenga alejado de la oficina para siempre, Los edificios necesitan ‘una vibra’ y ‘vecindarios’ sin escritorios para hacerlos divertidos si alguien decide entrar.
La unidad de software libre de IBM, Red Hat, ha revelado que su personal no necesita volver a la oficina, nunca. Pero si lo hacen, descubrirán que les esperan “barrios” de colaboración. Según Register.
La noticia de esta política llegó en un post de la vicepresidenta senior y jefa de personal Jennifer Dudeck, quien dijo que más del 30% del personal trabajaba a distancia antes de que una determinada pandemia hiciera que esta práctica fuera más aceptada.
Ahora Red Hat “ha ampliado la flexibilidad ofreciendo a la mayoría de nuestros empleados la libertad de ser ‘office-flex’, donde pueden venir a la oficina tanto como necesiten, o no venir en absoluto si así lo desean”. Sin embargo, se anima a los altos cargos a trabajar desde las oficinas de la empresa “para interactuar y aprender más”.
Dudeck dijo que la política refleja el hecho de que algunas personas tienen excelentes razones -como seres queridos inmunodeprimidos- para no visitar la oficina.
“No estar limitado por la ubicación a la hora de contratar ofrece una oportunidad mucho más amplia de atraer y retener a grandes asociados, especialmente cuando se trata de talento diverso”, añadió, antes de señalar que la comunidad de FOSS colabora sin interacción física y lo hace con famoso éxito.
El artículo de Dudeck incluye una sección titulada “La oficina es un ambiente” que explica que Red Hat se ha dado cuenta de que las oficinas tienen que ser algo más que un lugar al que se va a trabajar.
“Como la mayoría de nuestros empleados tienen la flexibilidad de decidir cuándo quieren utilizar la oficina, nos dimos cuenta de que tenía que ser un lugar en el que los empleados pudieran conectar con la cultura de Red Hat, colaborar y participar más plenamente. En pocas palabras, si los empleados no van a la oficina todo el tiempo, es aún más importante que sea divertida, funcional y agradable cuando lo hagan.”
Esto significa que las oficinas de Red Hat contarán con “‘barrios’ donde los equipos se reúnen para trabajar” y que incluyen “muchos menos escritorios y más cabinas, sofás y pequeños espacios de colaboración”.
Lo que suena bien para la colaboración, y tal vez menos bueno para aquellos con espinas dorsales comprometidas con el sofá.
Toda esta apertura va acompañada de un “centro de decisiones abierto” que Dudeck describe como “un lugar central para que los Red Hatters participen en las decisiones activas, expresen sus opiniones, tomen parte en las encuestas y sigan la historia de cómo y por qué se tomaron las decisiones”.
“Mirando el Open Decision Hub, los asociados pueden ver qué líderes están impulsando un tema, qué está abierto a comentarios (y qué no) y en qué punto del proceso de decisión nos encontramos”.
Los clientes de Red Hat quizá sepan ahora cómo obtener un poco de ventaja: preguntar quién está impulsando un tema importante y si está obteniendo una buena tracción del Hub.
Todo lo anterior va acompañado de una reflexión sobre cómo hacer que el nuevo lugar de trabajo funcione.
“Un enfoque del trabajo sin límites requiere un mayor énfasis en permitir la colaboración digital y la seguridad psicológica, porque la inclusión y la confianza potencian los equipos distribuidos eficaces”, escribió Dudeck.
La política de flexibilidad de Red Hat parece ser maximalista en comparación con sus pares. Apple quiere que la gente vuelva tres días a la semana, al igual que Google. Tesla quiere que los ejecutivos vuelvan a tiempo completo. Salesforce no quiere imponer la vuelta a la oficina porque su director general, Marc Benioff, no cree que funcione.
Y la NASA ha culpado al trabajo desde casa de los retrasos en al menos una misión: el rover VIPER, que buscará sustancias químicas útiles en el Polo Sur de la Luna a partir de noviembre de 2023. Se podría pensar que la NASA está bien equipada para trabajar a distancia.
Fuente: www.somoslibres.org